CUMPLEAÑOS FELIZ

Ayer le di muchas vueltas a toda esta historia. Supongo que tendrá que ver el hecho de estar recordando todo y escribiéndolo. Sé que me ayuda hacerlo y como para mi es inevitable recordar y sacar conclusiones, no me preocupa hacerlo. Hoy además dos personas me han dicho que siga escribiendo que les encanta cómo lo hago, así que eso me da más ánimos para seguir adelante. GRACIAS ;)

Después de los momentos tan bonitos del sábado, el domingo me lo pasé casi entero en casa: hacía mucho frío, estaba cansada y además estaba dedicándole mi tiempo al blog. Durante todo el día me iban y me venían todo tipo de recuerdos: Recordaba su cara de emoción del día anterior…. Y no podía intentar imaginar lo que estaría haciendo en ese momento. Estaría celebrando su cumpleaños con Miriam y su familia, disfrutando de buenos momentos con ellos. El año pasado yo fui la privilegiada que lo pasó con él, este año, al menos, había tenido la suerte de poder verle por video llamada mientras abría mi regalo.

Me encantó la forma en la que pude organizarlo para que lo recibiese como una sorpresa y ponerle emoción, pero por otra parte me sentía un poco tonta. Cuando hablé con él me dijo que le había encantado la forma en la que lo había recibido y yo añadí que de lo contrario a saber cuándo se lo hubiese podido dar. Entonces él me dijo que como no suele recibir regalos, se hubiese acercado hasta casa a por él antes de ir para la suya…… Así que, para venir a verme a mi tienes complicaciones, pero si se trata de recoger un regalo para ti sí que sacas un ratito de donde sea……

Me sentí tonta por varios motivos; por molestarme en crear ese misterio y sorpresa creyendo que para él sería algo maravilloso, por perderme su visita y el abrazo que acompañaría si hubiese tenido que venir a buscar el regalo, por quedarme con ganas de haberle visto aún cuando me está diciendo que sólo vendría para recoger el regalo,….. En fin, para estas cosas no tenemos las mismas apreciaciones.

De todas formas, estaba muy contenta de que todo hubiese salido según lo previsto y como tampoco esperaba verle, no hubo sorpresas.

Ayer imaginaba que se pasaría un momento por el chat, pero después de pasar casi todo el día dándole vueltas a las cosas, vi que ya eran más de las 7 y no estaba conectado, así que supuse que en alguna de mis cábalas había fallado.

Pensé mucho en la situación actual: Mientras estamos juntos sé que Joseba está encantado de la vida y no hay otra cosa para él que no sea yo, pero cuando no estoy, aunque dice acordarse de mi, sé que no es de la manera que yo quisiera. Es normal que te acuerdes de alguien que forma parte de tu vida (aunque cada vez sea menos), pero tan sólo es eso, un recuerdo. No creo que ese recuerdo le genere unos sentimientos especiales ni una necesidad. Es como aquel que recuerda un viaje a un lugar que le encantó, el recuerdo no significa que vaya a coger todas sus cosas y se vaya a ir allí a la aventura, sino más bien que si alguna vez puede porque su vida se lo permite, volverá a disfrutar de lo que le gustó durante otro rato. Se trata de una buena opción…… Aunque no la mejor.

Cuando amas de verdad eso te genera unos sentimientos y unas necesidades físicas, pero sobre todo psíquicas sobre la persona amada. No puede ser que ames a alguien y cuando no esté se te olvide. No puede ser que los sentimientos se olviden en un momento, pero mucho menos que vuelvan a renacer tan rápido como se fueron. No puede ser que decidas seguir un camino en tu vida y que cada vez que realices una parada juegues a ser otra cosa.

Tengo claro que Joseba no me ama….. Nunca lo ha hecho, por más que él diga que al principio sí, nunca fui su elección, nunca dejó nada por mi ni se planteó el cambio….. Tan sólo aprovechó y disfrutó de lo que vivimos esa primera temporada hasta que vio que no tenía por donde salir y entonces fue cuando de golpe y porrazo (como siempre) me dejó sola y destrozada. Por eso sé que no me ama, pero creo que tampoco a Laura….. Y lo que es peor, tampoco a Miriam.

Suena un poco fuerte, pero creo que no me equivoco al pensarlo: En su vida tiene lo que quiere, lo que le hace feliz, lo que ha elegido. Miriam es la mejor opción ya que tiene las mismas aficiones, los mismos gustos, le da libertad, etc. Según él, es PERFECTA. Entonces ¿por qué cada vez que ella falta Joseba va en busca de algo CASI perfecto?

En otra ocasión, hablando de Laura, me dijo: “Si no fuera porque sé que a ti te molesta, estos días que no has estado hubiese quedado con ella, pero no lo he hecho por ti”

Ohhhhhhhhhhhhhhhh…. ¡¡Qué detalle!! Si sólo nos fijamos en la parte superficial es un encanto, pero hay que analizarlo fríamente: No es que no quede con ella por que no le apetezca, tan sólo es para que yo no me enfade…. Y eso teniendo en cuenta que sea verdad, ya que después de la última mentira me cuesta creerle, sobre todo si se trata de algo relacionado con Laura. Pero si sigo analizando todo esto me pregunto: Así que esto es por respeto a mi….. ¿Y ese respeto no deberías tenerlo hacía Miriam en vez de hacia mi?

Me dice que no entiende el motivo, pero que es así. Cuando le hago la reflexión de que a Miriam le está faltando al respeto cuando está conmigo, asiente, pero no le da importancia, total, si ella no está….. Y eso es le que creo que le pasa también conmigo: Cuando tiene a Miriam tiene todo lo que necesita y ni se acuerda de mi, pero cuando ella se va, yo soy la mejor opción (al menos eso dice), pero eso sí, a sabiendas de que cuando Miriam decida volver (15 días, un mes, dos meses, un año…..), él rápidamente volverá corriendo a casa y ambos actuarán como si nada hubiera pasado. Tal es el punto que ni se van a preguntar el uno al otro por lo que han hecho, por si el saber les afecta….. Una relación basada en la confianza y el interés mutuo ¡¡sí señor!!

Comprendo que si algo de bueno tiene una relación así si la comparamos con la habituales, es que no discutes y no te llevas malos ratos, pero….. ¿Todo lo demás? No sé, prefiero seguir creyendo en las relaciones como siempre las hemos vivido que esta “amistad ideal” que otros quieren. Este tipo de relaciones yo también las tengo…. Con mis mejores amig@s, con la única salvedad que no practicamos sexo, pero el resto es lo normal. Los amigos los eliges por afinidad, mismos gustos, mismos intereses, forma de vida similar,…. El amor de pareja es otra cosa, o al menos así lo creo yo, y me niego a cambiar de opinión, al menos de momento. Me da igual no poder subir a la montaña más alta junto a él o no ser capaz de caminar durante todo el día sin comer, creo que lo que yo hago con él y por él implica mucho más que eso….. Y para lo demás ya están los “compañeros” ;)

Una de las cosas que más me molesta de esto es el no poder evitar estar ahí. Yo no le busco, pero suelo estar disponible cuando él lo hace, por que quiero aprovechar las pocas ocasiones que se presentan, pero por otra parte, creo que si no soy lo que quiere, debería acostumbrarse a que yo no estuviese para él……. Aunque creo que no le costaría nada hacerlo, mientras que yo estaría “alterada” un tiempo.

Todo esto viene a raíz de la pequeña conversación que tuvimos ayer por el chat. Resulta que dice que su mejor momento del día del cumpleaños fue el que pasó conmigo por videollamada. En su día especial, salió a tomar algo y el resto del día se lo pasó en casa. Supuse que con mal tiempo y con buena compañía era lo mejor que se podía hacer pero….. ¿Tan buena compañía es quien después de 20 años con la misma persona olvida el día de tu cumpleaños? Está claro que no se basa en los detalles, sino más bien en la costumbre, pero ¿no es costumbre felicitar a alguien el día de su cumpleaños?

Entiendo no celebrar la navidad, ni los Reyes (a mi tampoco me hace ninguna ilusión), pero si no celebras el cumpleaños ¿qué celebras?

Me contaba que no le importaba, que no esperaba nada porque ella está en el paro…..  Claaaaaaaaro!! Felicitar es tan caro…… Yo le he demostrado que no hace falta gastar mucho para dar una sorpresa y tener un detalle, además……. ¡¡¡Felicitar es GRATIS!!!

Dice que así es mejor, que el momento bonito lo tuvo conmigo y que con ella “lo pasa bien” ya que cuando le recuerda que olvidó felicitarle a ella le remuerde la conciencia. Vamos, lo normal en una pareja :P

En fin, creo que al final, a Joseba le pasa como a los ciudadanos con la política; todo el día nos estamos quejando, pero al final nos conformamos con lo que hay…… TENEMOS LO QUE NOS MERECEMOS.

DÍA DE SORPRESAS

Sábado de lluvia y mucho frío..... Pero maravilloso al fin y al cabo.
Me levanté llena de energía, como si hubiese dormido un día entero y me dispuse a comenzar ese día que tanto prometía. Tenía que ir con Maider por la mañana a hacer unas cosillas y sin prisas ni estrés nos fuimos, sin saber muy bien en que orden haríamos todo lo que nos habíamos propuesto.
Cuando terminamos todo teníamos que ir a Bilbao a dejar aparcado el coche, pero teníamos que venir a comer aquí; por la tarde quería cocinar varias cosas para tener para toda la semana y no tener que pensar lo que vamos a comer cada día. Así que lo ideal era dejar ya el coche aparcado y después pasar por donde Joseba para dejarle la sorpresa y así lo hicimos.

Al final, entre una cosa y otra nos dieron más de las 2 cuando estábamos llegando a dejar la sorpresa. Por una parte quería dejarla cuanto antes y así quedarme tranquila, pero por la otra no sabía si la hora sería la adecuada. Mi idea inicial era ir un poco antes y así pillarle comiendo y asegurarme que no me vería. La otra opción que pensé era a eso de las 3.30. A esa hora estaría con Laura tomando café tal y como me dijo que harían y así también me aseguraba que no me pillará con las manos en la masa. 
Dándole vueltas a esta duda me di cuenta que era o jugármela y dejarlo en ese momento, o esperar hora y media para dejarlo a la hora del café. La verdad es que no me apetecía nada tener que esperar tanto rato y además exponerme a encontrarme con Laura.
Decidí entrar y hacerlo lo más rápido posible. Era muy probable que aún siguiese comiendo, o que al menos estaría por el comedor y no tenía motivos para pasar por la entrada....... ¡¡Salvo que se le ocurriese llamarme!! En ese caso me pillaría de pleno y se fastidiaría todo.....
- "Bueno, la suerte está echada ¡¡Vamos!!" - le dije a Maider y ambas nos dirigimos a la entrada.
Allí había un compañero de Joseba al que no había visto nunca, pero parecía simpático, así que le sonreí, le saludé y le dije:
- "Quería dejarle esto a Joseba aquí, pero no quiero que le avises...... Yo le avisaré a él para que pase a buscarlo ¿es posible?"
- "Quieres que lo guarde aquí ¿a la vista o lo escondo?"
- "Eso no importa. Déjalo donde puedas, pero sobre todo, no le avises que yo lo haré luego." - le respondí más sonriente aún al darme cuenta que me ayudaría.
- "Tranquila que no está por aquí, no le puedo avisar." - respondió mientras esbozaba una sonrisa y guardaba la bolsa en un cajón.
Le dí las gracias y me fui plena de satisfacción por haber encontrado el momento perfecto para pasar "sin ser vista". 

En el camino de vuelta a casa no podía dejar de sonreír. Me sentía como una niña cuando tiene preparada una sorpresa para alguien y no se puede contener sin decirlo. Joseba sabía que yo tenía un regalo para él. Un día de los que pasó por la tienda a verme le mostré un paquete envuelto con papel de regalo y lo volví a guardar. Quería que le picase un poco la curiosidad,..... Pero no me preguntó más veces. Se ve que tiene más paciencia que yo, jejejejejejejjee. En fin, él sabía que yo tenía un regalo para él, pero como eso era algo evidente, incluso antes de enseñarle la caja, no le di importancia y le dije que ya se lo daría otro día. Nunca se imaginaría que su regalo ya estaba más cerca de él que de mi.
Cuando llegué a casa y saqué el móvil del bolsillo del pantalón, vi que tenía 2 llamadas perdidas. Era Joseba que me había llamado a media mañana. ¿Cómo puede ser que no me dé cuenta de que el móvil vibra en el bolsillo? Creo que tengo el culo insensible, jejjejejejee...

Tenía que hacer la comida y además tenía que cocinar también lo de la semana y ya eran casi las 3. Encendí el chat y vi que estaba conectado, pero ausente, así que le salude y le dije que después hablaríamos. Cuando terminé de hacerlo todo me senté de nuevo y ya sí que me conecté y al poco rato nos encontramos.
Joseba: Holaaaaaaaaaaa ¿estas disponible????
Yo: Hola ;)
Joseba: ¿Cómo estás?
Yo: de cocinillas ;)  jejejejejejejejejejee
Joseba: ¿Ya sabes que te he llamado????
Yo: sí, pero lo he visto a las 3, cuando te he escrito  :P  jejeejejejejjejeeje
Joseba: ¿Seguro???
Yo: claaaaaaaaaaaaaaaro!!!
Joseba: ¿Dónde me has escrito????
Yo: en el chat
Joseba: no he visto nada
Yo: ya ya.... Estarías ocupado, jejejejejejejjeejjejeje   :P
Juanjo: No lo he visto...... Sorry
Yo: Pues a las 3 más o menos me he conectado y te he visto en naranja
Joseba: Pensé que estarias picada como una monita
Yo: Claaaaaaaaaaaaaaaaaaaaro!! ¿Xq? Ya sabes que soy un desastre con el móvil
Joseba: Bueno, de todas maneras si te picas, tendrás razones
Yo: ¿Tú crees?
Joseba: Te dejo abandonada
Yo: Como siempre, pero hoy es día de curro..... ¡¡Hoy toca!!  :P  jejejejejjejejejeje
Joseba: Es triste, pero es así. El resto de la semana ya sabes lo que pasa.........
Yo: Claaaaaaaaaaaro!! Que tu agenda te tiene matado  :P  jejejejjejejejejeje
Joseba: Te juro que me acuerdo de ti, y además he pensado algunas de las cosas que me dices
Yo: ohhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhh  ¡¡¡Has pensado!!!
Joseba: Bueno, lo he intentado........
Yo: pero no te emociones que si se  sobrecarga........... jejejjejejejejejejejejeje
Joseba: Tienes que pensar que soy tonto

Nunca he pensado que sea tonto, pero a veces sí que me parece que su postura de no decidir y dejar que los demás lo hagan por él es un poco tonta. Está claro que si decides no decidir, ya estás decidiendo, pero ¿cuál es el verdadero motivo por el que prefiere dejarlo correr? ¿Miedo al error? ¿Pasividad? ¿Indiferencia? ¿Falta de sentimientos?
Está claro que no es una postura que a mi me guste adoptar, pero reconozco que al menos cómoda es. Por otra parte, no deja de sorprenderme que se "asuste" al creer que puedo estar enfadada..... Eso significa que no me equivoqué al pensar que me había escuchado y entendido, pero también sabía que se le volvería a pasar la semana sin dar noticias.

Continuamos un rato largo de chat mientras escuchaba ganar a mi Athletic por la radio, así que fue un rato tremendamente ameno. Me preguntó por mi blog; le picaba la curiosidad de lo que escribo y me preguntó si lo podría leer, a lo que le respondí que una vez hecho lo podría ver todo el que quisiese. A eso de las 18.30 le dije que necesitaba que hiciese algo y rápidamente se ofreció:

Yo: Por cierto
Joseba: Dime
Yo: Cuando puedas tienes que hacer una cosita  ;)
Joseba: Dímelo y lo intento
Yo: Ve a la entrada y diles que te den lo que hay para ti en el cajón  ;)   ¿Podrás?
Joseba: ¿Cuándo has pasado??? A las 4???
Yo: Estabas ocupado
Joseba: ¿Me has visto????
Yo: No
Joseba: ¿Y cómo lo sabes???
Yo: Estabas trabajando  :P  jejejejejejjejejejjejejeje.....  Eran la 2 y poco
Joseba: Entonces has venido a las 2.30

Aproveché esto para empezar a divagar sobre la hora a la que había ido y así poder entretenerle. Comencé a cantarle los goles del Athletic y cuando empezó a insistir en que iba corriendo a la entrada y que volvía rápido, le empecé a hablar de los lances del partido, pero llegó un momento en el que ya le dio lo mismo y me dejó allí sola escribiendo :P

En menos de 5 minutos estaba recibiendo su llamada telefónica. Estaba tremendamente emocionado; me decía que había leído la carta muy rápido y que se había lanzado a abrir el paquete, pero que algo en su interior le había dicho que no estaba haciéndolo bien y había decidido llamarme. ¡¡¡Claro que algo no estaba bien!!! La carta decía claramente que no se podía abrir hasta el domingo y...... ¡¡¡Aún era sábado!!!

Estaba ansioso por abrirlo, pero no le dejé hacerlo y eso casi me cuesta enfadarme de verdad. No quería atender a razones y decía que si ya había empezado, daba lo mismo seguir y abrirlo ya, pero yo no me lo quería perder. Lo que más me emocionaba de todo esto era ver su cara mientras abría el regalo (eso que decía no poder hacer nunca) y necesitaba que estuviese un rato dándole vueltas para que la emoción fuese aún mayor y se transmitiese por el chat (aunque sabía exactamente la cara que pondría y lo que sentiría). Tras calmarle el ansia de abrirlo, prometió guardarlo y no abrirlo hasta las 12 de la noche frente al PC para que yo lo pudiese ver por videollamada.

23:55
Joseba: Holaaaaaaaaaaaaaaaa
Yo: Holaaaaaaaaaaaaaaaa
Joseba: ¿Puedo ya?
Yo: Noooooooooooooooooo
Joseba: jejejejejeje
Yo: Espera, jejejejejejejejeje
Joseba: No puedo..........

Conectamos la cámara y comenzó "El mejor momento del día". De nuevo me dolía la cara de sonreír, como el día que estuve por primera vez en su trabajo y me di cuenta que me gustaba más de lo que creía. Todo estaba perfectamente conectado con nosotros y cada detalle tenía su sentido. El paquete que el recogió era una bolsa de mi tienda con la carta de felicitación y las instrucciones (que no hizo ni caso). Al abrirla había una bolsa con topos en los que se leían frases cortas como "Love u", "Miss u", "For u". Como la bolsa tenía tonos plateados, el lazo que la decoraba era plateado, pero con el interior en rojo (mi color). Esa segunda bolsa escondía una caja envuelta en papel de regalo y a la vez decorado con pegatinas con montajes fotográficos de imágenes suyas como niño, como superbaby y varias más muy divertidas. Abriendo ese envoltorio había una caja en la que sobre un fondo vaquero se simulaban dibujos de arena muy apropiados; un sol, estrellas, dos muñecos de la mano,.... Al abrir esa caja había un nuevo envoltorio y dentro había un corazón de peluche con el lema "Soy un diablillo" muy adecuado para esas ocasiones en las que dice que paso de ángel a demonio :P  Pero no terminaba ahí todo. El corazón tenía una cremallera y al abrirla salía un demonio de peluche con un corazón en la mano que decía "Y ardo por ti!" ¡¡Ideal!! Y para rematar, en las manos llevaba un sobre con el verdadero regalo: un pendiente. Le dije que le iba a regalar uno de los que no se sueltan para que no lo perdiese como le pasa con la mayoría y aunque él ya no lo recordaba, yo sí.



- "Da igual lo que hablemos y pensemos...... Al final juntos estamos de maravilla".
- "Tienes razón. Yo no sé de qué forma, pero lo que tengo muy claro es que no quiero que salgas de mi vida".
Otro de los temas que tocamos en nuestra laaaaaaaaaaaaaaarga charla por chat y teléfono fue el sábado pasado; ¿Habíamos arreglado algo? ¿Habíamos sacado alguna nueva conclusión? ¿Cómo nos habíamos sentido? ¿Cómo gestionar esto?
Nos reímos al darnos cuenta que nada de eso tenía respuesta y me pidió mi conclusión:Después de el maravilloso momento vivido "juntos" todo fueron sonrisas y conversación amena. Incluso cuando me habló de Laura me molestó menos que las demás veces. Quizá el contenido de lo que me contó influye, pero aún así, creo que comienzo a estar impermeabilizada ante ciertas cosas. La verdad es que si lo que me contó es cierto casi puedo estar orgullosa. Le dijo que no tenía ningún interés en ella más allá de la amistad y que lo mío era muy diferente, que yo estaba muy por delante de ella y que me respetase. Dice que ella lo entendió y que además en ningún momento le mostró mayor interés...... Pero es que no pudieron apenas estar solos, por lo que es normal que ella no le dijese nada. Dice que en otro momento retomarán la conversación por si le tiene que aclarar algo......... Eso significa que volverán a quedar......
BUENAS NOCHES ;)

CONCLUSIONES

De nuevo ha pasado la semana sin contacto, justo lo mismo que le dije que no me había gustado la semana anterior. La verdad es que no me ha sorprendido mucho; realmente era lo que me esperaba. Sé que me escuchó y me entendió, pero al final se le pasan los días igual. Así que contaba con no tener noticias por su parte hasta mañana, día en el que trabaja. Ese es el día que tiene tiempo, si no, no sé nada de él.
Bueno, en realidad sí que hablamos el domingo unas horas después de habernos despedido. Ambos estábamos muy cansados y para no fallar en nuestras coincidencias, ambos habíamos dormido 5 horas!!
Hablamos un ratito de esos nuestros de 2 horas: a los 20 minutos miramos el reloj y nos pareció que había pasado un ratito, pero luego, como siempre, la otra hora y media laaaaaarga había pasado sin enterarnos. Eran más de las 12, por lo que hicimos lo que teníamos que hacer; despedirnos, darnos las buenas noches y ¡¡a dormir!!
También coincidimos un poquito el martes en el chat. Estuvimos una media horita, así que poco hablamos (no estamos acostumbrados a ratos tan cortos, jejejejeje). Yo me tenía que ir ya, así que le dije que si cuando llegase a casa seguía por ahí ya seguiríamos. Me comentó que tenía varias cosas que hacer, así que estaría aún un rato y que era muy posible que nos encontrásemos de nuevo.

Al llegar a casa, me cambié, encendí el router, el PC y conecté el chat...... Pero ya no estaba :(
Además no me había puesto nada de que se iba. ¿Será que le ha fallado la conexión? ¿Será que ha dejado un momento el ordenador y vuelve en un rato?
Ese ha sido el único contacto de la semana..... ¡¡Pero mañana trabaja!! Así que aunque solo sea por costumbre, sabré de él. Supongo que nos encontraremos en internet y después hablaremos por teléfono (como ya he dicho, hay cosas que nunca cambian). Pero además, mañana es un día diferente, especial, inesperado. Mañana tengo preparada una sorpresa para él.

El domingo es su cumpleaños. No cabe duda que me gustaría poder celebrarlo con él, pero como resulta imposible, al menos quiero que me tenga presente y le he preparado un detallito: un regalo que le tenía prometido, pero además envuelto y vuelto a envolver para que tenga que ir abriendo y emocionándose. Siempre que hablamos de regalos, él me cuenta que a él no le suelen hacer regalos y que si se los hacen, no suelen ir envueltos ni con detalles. Tampoco tienen la costumbre de los regalos en cumpleaños o navidad, así que era un buen momento para poder darle eso que extraña.
Me pasaré por su trabajo en un momento que no me pueda ver y se lo dejaré allí. Pediré que me lo guarden y que no le digan nada. A media tarde le llamaré o le pondré un sms, según la hora, y le diré que pase a por algo que hay para él. Creo que le va a encantar, aunque solo sea por la emoción de esa sorpresa,...... En el fondo es como un niño y me encanta verle así. Por eso, como no me lo quiero perder, el regalo lleva una carta en la que le dice que antes de abrirlo vaya al chat..... Yo estaré al otro lado y gracias a la videollamada, NO ME PERDERÉ ESE MOMENTO ;)


Mañana en teoría, tendrá también visita de Laura. Dice que quiere pasar a saludar a unos compañeros de Joseba (¡¡venga va!!) y así de paso le felicita ya que el domingo no le va a ver (¡¡ni yo!!). Yo ya le dije lo que me parecía y no quise decirle nada más; creo que sigue insistiendo por si vuelve a conseguir algo y es mucha casualidad que pase a saludar a sus compañeros, justo el día antes de su cumpleaños. Él le quiso quitar importancia y añadió que mientras vaya al trabajo a visitarle no había problema.
También me dijo que le iba a hablar de mi; dice que yo soy muy importante en su vida y que si creo que tiene que aclararle cosas quizá tenga razón y que cuando vaya a tomar café hablará con ella...... ¡¡Flipo!!

¿Será capaz de hablar con ella y aclararle la historia? ¿Le dirá que ella no le importa y que yo sí? ¿Cómo se lo tomará ella si se lo dice? La verdad es que me dejó un poco descolocada cuando me lo dijo,..... Pero por otra parte me sentí bien, me sentí importante y sentí que lo decía de verdad. Ahora sólo queda esperar y ver lo que pasa,..... Sólo unas horas y pueden pasar muchas cosas; la sorpresa, la conversación, nuestro rato.......

SÁBADO

Por fin había llegado el tan esperado día. Habíamos quedado a las 5, así que aún tenía toda la mañana por delante, jornada laboral incluida. Estaba un poco nerviosa,….. Más bien impaciente por lo que pasaría. ¿Cómo íbamos a empezar a hablar?, ¿Saldrían todos los temas?, ¿Hablaríamos civilizadamente o nos enfadaríamos?, ¿Sería la última cita?...... Todas estas y una infinidad de preguntas más, no paraban de dar vueltas en mi cabeza mientras dejaba pasar el rato esperando a las 5.

Una vez terminado el trabajo el resto paso rápido y a menos cinco ya estaba lista. Unos diez minutos después recibí su llamada perdida y baje, tal y como habíamos quedado. Normalmente me espera abajo y cuando bajo, bien aparcamos o bien vamos a otro sitio a tomar algo. El sábado, cuando salía de casa, al ir a girar la calle escuché un silbido y cuando miré allí estaba Joseba. Había tenido suerte y pudo aparcar ahí al lado,…. ¿Dónde yo nunca encuentro sitio? Pues justo ahí, jejjeejjeeje.

Durante la semana le dije que ya que era él quien más tenía que hablar, él iba a ser quien decidiese dónde, así que le tocaba mandar. Fuimos a uno de los bares que solemos visitar habitualmente y nos sentamos en una de las mesas más lejanas a la barra para poder tener mayor intimidad.

Las conversaciones iban surgiendo espontáneamente y saltábamos de un tema a otro con gran facilidad. Es complicado seguir un hilo cuando tienes tantas cosas en común y el hábito de hablar tanto como lo hacemos él y yo. Quería que fuese él quien empezase a hablar y no me decepcionó al comprobar que no fue necesario tener que preguntarle o sacar el tema.

Realmente hablamos pocas cosas nuevas, pero al menos, algunas de las que ya habíamos hablado las dejamos más claras.

Una de los temas de los que más hablamos fue de Laura: A mi me había dolido muchísimo la actuación de Joseba hacía ella, y de rebote, hacia mi. Él siempre me ha dicho que fue un accidente, pero ¿cómo va a ser un accidente? No se me ocurre la forma en que alguien se pueda tirar a una persona por accidente…… Y menos, ¡¡varias veces!!

Supongo que a él le dejaba la conciencia más tranquila pensar así, pero lo que es a mi, en absoluto. Esas palabras no solo me hacían entender lo poco que podía importarle ella, si no que además, me hacían ver lo poco que había sentido hacia mi. Al intentar explicarme su historia con ella, yo cada vez me sentía más identificada, pero al preguntarle, su respuesta siempre era: “No, contigo es completamente diferente”.

Eso por una parte te tranquiliza, pero por la otra te inquieta: Si conmigo es completamente diferente, ¿cuál es el motivo de que a veces sienta que me trata igual que a ella?. Me dice que le está dejando espacio poco a poco para que se vaya alejando y se vaya olvidando de él….. ¿Acaso no es lo mismo que me está haciendo a mi?

Me dice que nunca quiso tener nada con ella,….. ¿Y más de medio año después aún sigues así?

Por otra parte, dice que le cae bien, que con él siempre se ha portado muy bien y que le ha tratado muy muy muy muy bien (esa redundancia fue otra de las cosas que me sentó fatal de toda esta explicación) y que ahora tampoco podía mandarla a la mierda sin más. Añadió también que es una tía divertida y que con ella se ríe mucho, pero que nada más. Si estás tan seguro de no querer nada más ¿qué miedo tienes de quedar con ella?

Según él no es miedo, es solo que así evitará situaciones que no quiere,….. Pero ¿si no quieres no debería bastar con eso? Yo cuando no quiero algo con alguien y lo tengo tan claro como dice tenerlo él, me da lo mismo estar con esa persona a solas, sé que no va a pasar nada que yo no quiera. Pero claro, es que a lo mejor tiene que decirle que no y entonces queda mal,….

-          “Lo que realmente te pasa es que quieres tenerla guardada en la recámara por lo que pueda pasar, poder llamarla y hacerle una visita”

-          “ De verdad que no es eso. No quiero que pienses así. Es sólo que no tengo motivos para tratarla mal. Tiene muchos problemas y cuando hablo con ella percibo que se anima un poco. Sólo es eso. Hablar de vez en cuando, pero cada vez menos a menudo, así que poco a poco se irá dando cuenta de cual es su lugar”

-          “Y ¿cuál es exactamente su lugar?”

-          “Ella sabe que no hay nada. Ya se lo he dicho un montón de veces y lo ha entendido”

-          “Claaaaaaaaaaaaaaaaaaaaro!!! ¿Cómo no lo va a entender? Le dices un montón de veces que no hay nada, que se desenganche de ti, etc. Pero no dejas perder el contacto; la llamas, la escribes y de vez en cuando quedas con ella. Lo normal cuando pasas de alguien y quieres que se olvide de ti…..”

-          “Pero de verdad te digo que no significa nada. Por ella no siento nada, sólo me cae bien, pero eso no tiene nada que ver con lo que siento por ti. Lo tuyo sí es verdadero, a ti sí te quiero. Apenas te lo he dicho aunque siempre lo he sentido, pero no me parece justo repetírtelo. No puedo darte todo lo que me gustaría darte, pero lo que siento por ti es real. ¿No lo notas?”

-          “Sé que tienes sentimientos por mi, lo he percibido estando contigo, pero me cuesta enormemente creerte cuando me hablas de Laura. Nunca tuviste ningún interés por ella y por mi sí, pero en cuanto me retiré, o mejor dicho, me mandaste para mi casa con una patada en el culo, te faltó el tiempo para buscarla.”

-          “Pero yo no la busqué. Ella estaba pasando un mal momento y sólo trataba de animarla, no fue nada más. Además hace ya dos meses que no la veo y como mucho hablamos por teléfono cada 15-20 días”

-          “¡¡Menos mal!! No me cabe duda que la animaste, incluso más de lo que ella podía esperar, jejejejejejej….. ¡¡Le tocó el premio con una sola papeleta!!”

Este tipo de diálogo se fue repitiendo de diferentes formas, siempre entorno a lo mismo, Laura. A mi directamente no me ha hecho nada y por eso nunca la he criticado ni faltado al respeto, pero no puedo con ella. No tengo interés en ella y cada vez que sale en nuestras conversaciones, generalmente el palo me lo llevo yo. Si no es importante en la vida de Joseba ¿cuál es exactamente el motivo de que la mencionemos tanto? Supongo que es debido a que cada vez que ha tomado parte en esta historia a mi me ha hecho daño. No obstante y por mal que me caiga, la culpa en todo esto no es de ella. Laura sólo ha insistido para conseguir lo que quería,…. Y así ha sido. Por este motivo también es normal que siga insistiendo.

Joseba insistía en que por favor le creyese que ella no era importante para él, pero como ya he dicho muchas veces; me resulta imposible. Dice que me lo cuenta todo para que no tenga que andar sacando conclusiones o pillándole en mentiras. Que tiene tanta confianza conmigo que prefiere decírmelo todo, aunque sabe que a veces esas cosas me hacen daño. Y me pregunta qué es lo que puede hacer para que le crea.

Le dije que no se preocupase, que no era importante y que quien tenía que tener la conciencia tranquila con todo este tema debía ser él. A mi por mi parte, este tema no me daba lo mismo, pero nada que yo pueda hacer o decir iba a cambiar nada, ni de lo ya sucedido, ni de lo que pueda suceder. Me negaba a volver a sentirme tan idiota como hace unos meses me había sentido:

Calculo que fue a finales del mes de octubre (Joseba no me quiere confirmar la fecha) cuando cada vez que salía este tema me preguntaba qué podía hacer para que ella pasase de él. Yo intentaba darle mi opinión (aún con todo lo que este tema me molesta) sobre lo que yo haría en un caso así, lo que me parecía que podía pasar en cada caso, lo que creía que ella pensaría,…. Al final para poder cortar el tema, siempre le decía que no debía contarme esas cosas ya que para mi era muy difícil e incluso a veces doloroso responderle, que no podía ser del todo imparcial, pero él insistía en que era la única persona a la que podía confiar este tema.

Un día ya aburrida del tema le di la vuelta a la tortilla (o al menos lo intenté) y le planteé mi duda: Si para aclarar su situación con Laura recurría a contármelo a mi ¿a quién recurría para aclarar una situación conmigo?

Me dijo que en esos casos no puede recurrir a nadie, sólo a mi. Como eso no es ninguna solución le propuse que al igual que a mi me cuenta todo sobre Laura e incluso sobre Miriam, podía hacerlo también al revés, es decir, hablarles a ellas de mi y que le den opinión. Estoy segura de que si le contase a Laura la verdad de toda nuestra historia, esta no se lo tomaría todo tan a la ligera. Pero está claro que a él no le interesaba hacerlo:

-          “¿Cómo le voy a contar eso a Laura?”

-          “¿Qué pasa que a mi me lo puede contar todo y ya lo asumiré como pueda y a ella no? ¿Acaso te preocupa más que ella se pueda sentir herida que como me pueda sentir yo con todas las cosas que me cuentas?”

Él siempre se ha defendido diciendo que no es lo mismo contarme a mi sobre ella sin mayor importancia que contarle a ella todo lo que siente por mi. Según él, para mi es fácil escuchar todo lo que me cuenta ya que lo que me dice son tonterías, pero si le tiene que hablar a ella de todo lo que siente por mi a ella le puede hacer sentir muy mal,….. Además, cree que no es algo que deba contar a nadie por su situación, es decir, la existencia de Miriam.

Bueno, pues después de tener esta conversación varias veces, a finales del mes de noviembre un día que estábamos hablando por teléfono, no recuerdo ni de que manera salió el tema, pero hablando de otra cosa, le entiendo que hacía unas semanas que la había visto por última vez…..

Cuando él repetía tantas veces que hacía 2  meses que no la veía a mi me encajaba perfectamente, es decir, no la veía desde antes de irse a la competición deportiva de agosto, y eso me daba cierta confianza en él (la poca que me quedaba), pero por lo que hablábamos se trataba de menos tiempo:

-          “¿Me estás diciendo que has estado con ella después de volver de tus vacaciones?”

-          “Sí, pero sólo una vez ¿no te lo había dicho?”

-          “¿Crees que si me lo hubieses dicho te estaría preguntando ahora?”

-          “¿Qué piensas? ¿Te he decepcionado?”

-          “Pues la verdad es que sí. No me esperaba algo así y menos después de tener que estar escuchándote todas las veces que me decías ¿Qué puedo hacer para que pase de mi? Así seguro que es la forma de conseguirlo….”

Según él, le explicó que entre ellos no había nada más que una amistad y que no iba a pasar nada más, pero que ella insistió tanto en que eso no se podía hablar por teléfono que al final Joseba accedió a quedar con ella. El resto era de imaginar: como dice él normalmente sobre Laura, él no quería hacer nada, pero no lo pudo evitar y ella le violó,….. La misma mierda de siempre.

Joseba sabía de sobra dónde iba y lo que iba a pasar y si lo consintió fue porque quiso. Además se encargó muy bien de no decirme nada,….. ¿No era tan grande la confianza conmigo que no había nada que pudiese ocultarme?

No puedo decir exactamente la fecha en la que sucedió, pero sé cuando fue. Hubo un día en el que lo presentí, no sé el motivo, pero por mi cabeza pasó de golpe sin saber a qué venía. Supongo que noté un comportamiento extraño en él o quizá que no me dijese lo que iba a hacer,….. No lo sé exactamente, pero lo supe y cometí el error de borrarlo de mi cabeza como si me hubiese pasado de mal pensada. Para una vez que pienso mal y acierto, voy y me siento culpable por ello.

Todo esto influyó enormemente en que a partir de ese momento no me creyese nada de lo que me cuenta sobre Laura y dude de casi todo lo demás. A día de hoy en lo único que puedo creer es en su amistad y en aquellas cosas que un día sentimos juntos….. Del resto no me fío.

A partir de ahí es cuando me quedó clara la siguiente afirmación:

“Si te engañan una vez tú no tienes la culpa, si te engañan dos, sí”

¿Cómo se puede confiar en alguien que sabes que miente y manipula las situaciones para estar contigo? Es muy emocionante cuando lo hacen por ti pero, si lo hacen por ti, también lo harán por otras, por más que intenten venderte la moto de que tú eres diferente y que si no fuese así no lo haría. Todo se trata de palabrería para endulzar situaciones.

En fin, la situación es la que hay y tengo 2 opciones; aceptarla o rechazarla.

Debería pasar de todo esto y apartarme antes de volver a hacerme daño, pero creo que todo el daño que podía sentir, ya lo he sentido, así que poco más puedo perder. Por otra parte están mis sentimientos: Joseba me hace sentir como nunca nadie lo ha hecho, ni en 8 años de relación me han tratado así, ni mucho menos me he sentido tan valiosa como me siento con él pero ¿compensa cuando te apartan y eso que resultaba tan importante deja de serlo? ¿Me siento bien y lo disfruto o en realidad estoy perdiendo mi tiempo y mi respeto?

Supongo que estas dudas, al igual que las que nos planteamos sobre “Nosotros” no las voy a aclarar nunca, pero creo que más que por desconocimiento es por falta de intención,….. No me interesa solucionarlo,….. Al menos de momento.

En eso creo que también coincidimos y al final de varias horas de “debate” decidimos: “Esta situación no está bien y hay que buscar alguna solución…… Pero es que estamos tan bien cuando estamos juntos,……”, es decir, seguíamos igual que al principio de la conversación, sólo que habíamos dejado algún fleco un poco más claro.

Cuando el tema se terminó, o más bien lo terminamos, fuimos a tomar otra y cuando salíamos me dijo: “¿Quieres que estemos los dos solitos para que te dé cariñitos?” Y sin pensarlo dos veces fue lo que hicimos,…… ¡¡Hasta las 7 de la mañana!! Tenía que irse a trabajar, de lo contrario estoy segura de que nos hubiese dado al menos la hora de comer.

Como le he dicho desde el primer día: HAY COSAS QUE NUNCA CAMBIAN ;P

LUNES, LABORABLE

Había llegado al lunes sin noticias de Joseba, pero sabía que ese era el día en el que iba a saber de él; trabajaba, así que era fácil contactar un rato conmigo como si nada hubiese pasado.

Afortunadamente para mi, ese lunes anduve muy liada en el trabajo y apenas me conecté a internet: Estuve un ratito a la mañana a eso de las 11 y poco y allí me lo encontré. Era raro, ya que a esa hora suele tener actividad en el trabajo, pero como no podía ser de otra manera entre nosotros, coincidió.  Apenas fueron 5 minutos, pero nos dimos los buenos días y cada uno siguió a lo suyo.

El resto del día me conecté a ratitos, pero no nos encontrábamos. Cuando uno entraba, encontraba comentarios del otro de un rato antes, pero siempre nos cruzábamos.

Por la noche tenía que hacer un montón de cosas y apenas disponía de tiempo; son los inconvenientes de vivir como una nómada, de una casa a la otra cada semana, siempre trayendo y llevando cosas en mi mochila. De ahí lo de Princesa Mochilera, jejejejejejejeje…… Nunca nadie me habían llamado princesa hasta que Joseba lo hizo, así que cada vez que alguien lo hace, no puedo evitar recordarle.

En fin, aquella noche me acosté temprano; estaba cansada y no tenía ganas ni de charlar, ni de pasar sueño como siempre que Joseba me llamaba. ¿Debo sacrificar mis horas de sueño para mantener algo que a él no le preocupa lo más mínimo? Y esa noche decidí que NO.

Cuando me acostaba mire el móvil y me percaté de que estaba apagado por falta de batería, así que sin encenderlo siquiera lo puse a cargar……. BUENAS NOCHES.

El martes me levanté un tanto recuperada de mi cansancio del día anterior y cuando encendí el teléfono encontré dos llamadas perdidas, ambas de Joseba. Me había llamado a las 11 y a las 12 más o menos. Todo un detalle teniendo en cuenta que suele ser siempre a partir de las 12,…. Lástima que yo estuviese pendiente de otras cosas en ese momento.

Ya en el trabajo, cuando abrí el email me encontré un par de ventanas de chat de la noche anterior. Una era a las once y media casi y decía:

Joseba: No tas??????

Joseba: :’(

Joseba: B-)

Joseba: L

Así que llegada esa hora es cuando ya sí me echaba de menos……. ¿Y el resto del día? ¿Qué pasa que mientras no trabaja no tiene ni un momento para mi y cuando trabaja sólo me busca cuando se aburre? Eso era intolerable.

La otra ventana de chat era de la una menos cuarto más o menos:

Joseba: No hemos coincidido :’(

              Espero que sea por que te has estado divirtiendo.

Joseba: Cuando veas esto será de día, así que buenos días y que tengas un día bonito.

              ¡¡Muack!!

Claaaaaaaaaaaaaro!!! Una pena no haber coincidido ¿verdad? Es más o menos lo que me suele pasar a mi el resto de los días, así que por un día que le pasase a él tampoco pasaba nada. Le respondí dándole los buenos días a través de las mismas conversaciones por si le daba por mirarlo. De todas formas, tenía mis dudas que le diese mayor importancia al tema.

A las 10:30h más o menos y mientras atendía una llamada telefónica de la central en Madrid, me sonó mi teléfono móvil y era él. Evidentemente no podía responder, así que silencié el tono y lo dejé sobre la mesa. Volvió a sonar otras dos veces más, pero entre el teléfono, el cartero y mi jefe que merodeaba por ahí, era imposible responder. Esta vez parecía que el destino estaba de mi parte: Si quería saber de mi, tendría que tomarse mayores molestias. Un par de horas después se presentó en la tienda.

Entró y se acercó como de costumbre a darme un beso, pero no le dejé: es mi puesto de trabajo, cualquiera puede aparecer de golpe y no da buena imagen. Yo también tengo que preocuparme de qué dirán. Me preguntó por mi ausencia del chat y le expliqué que tenía cosas más importantes que hacer, además de estar bastante cansada y no estar dispuesta a pasar sueño por alguien a quien no le preocupo lo más mínimo, salvo cuando a él le interesa.

No le gustó lo que escuchó y me dijo que suponía que algo estaba mal, que no sabía el motivo, pero que sabía que algo me pasaba y que por eso se había acercado a verme. Además, también me reconoció, que de haber hablado la noche antes, no se hubiese pasado a verme.

“Pues eso es precisamente lo que me pasa. No tienes tiempo para mi salvo que sea yo la que lo busque. Además, quedamos en hablar el fin de semana y no has dado ni señales de vida” le dije.

Me explicó que el sábado estuvo a punto de llamarme, pero que finalmente decidió que era mejor no hacerlo. No creía que lo que debíamos hablar fuese urgente y que conociéndonos, al final tendríamos una tarde genial, pero no hablaríamos nada importante.

No sabía exactamente que parte de “Tenemos que hablar y sin tardar mucho” era la que no había entendido bien. Teniendo en cuenta que él también había dicho que lo creía necesario, se me hacía aún más surrealista. Para colmo, me dice que el viernes tenía pensado acudir a donde sabía que yo estaría de fiesta para tomar algo…… ¡¡Eso sí que no procedía de ninguna de las maneras!! Si tenemos una conversación pendiente, lo normal, es hablar y ver la situación, después ya veremos si procede compartir un trago de fiesta o no.

Finalmente me pidió disculpas por el malentendido y quedamos para poder tener esa charla lo antes posible, es decir, el siguiente fin de semana, ya que entre semana, mi trabajo me impide tener tiempo suficiente para tratar algo así. En principio quedaríamos el sábado por la tarde, ya que yo trabajaba por la mañana y el domingo trabajaba él, pero como quedaba toda la semana, ya concretaríamos.

Llegó el miércoles y mi jefe me obsequió unas entradas para poder ver El Circo del Sol: ¡¡Qué guay!! ¿Para cuándo son?........ Para el sábado por la tarde…….

Había entradas para el domingo, pero se las habían ofrecido a otra persona,…. Tendría que cancelar la cita con Joseba, y lo peor era que quizá tenía que ser hasta el siguiente fin de semana,……. No aguantaba la incertidumbre de lo que podía pasar, pero por otra parte, a lo mejor debía dejarlo correr como hacía él y ver lo que pasaba.

Como no esperaba verle por internet, le llamé por teléfono a eso de las 7 de la tarde (cosa que no suelo hacer, nunca sé en qué situación puede estar….), pero no respondió, así que no insistí más, ya vería la llamada perdida y me la devolvería,… Si quería.

Por la noche recibí un sms en el que me pedía perdón por no haber escuchado el teléfono y decía que lo que más le jodía era no haber estado cuando le había llamado. Le respondí que no se preocupase, que no pasaba nada y que sólo era para informarle de que no iba a poder quedar con él como teníamos previsto.  Me respondió diciéndome que el viernes por la tarde y le sábado estaría disponible y que si encontraba otro hueco le dijese. Le indiqué que quizá el sábado más tarde (no quería esperar otra semana más), pero que él dijese. En el último mensaje me decía que hasta que entrase a trabajar el domingo estaba disponible y que ya hablaríamos para quedar.

Al día siguiente, jueves, pude cambiar las entradas del sábado para el domingo, por lo que podía mantener la cita con Joseba, así que le llame a media mañana para que no hiciese otros planes. Esta vez sí respondió a la llamada. Le comenté mi cambio de planes y me dijo que perfecto y que ya hablaríamos antes del sábado para concretar. “¡Pero si estamos ya a jueves! ¿Cuándo vamos a concretar?” le dije. Respondió que tenía que venir a Bilbao a una cosa del trabajo y que se iba a pasar por la tienda después, antes de que me fuese a comer.

Cuando vino volví a ponerme en mi sitio y no le dejé que me besase. Llegó bastante tarde, así que apenas empezamos a hablar dio la hora de cambiarme para irme, así que le dije que si me esperaba unos minutos seguiríamos hablando tras cambiarme. Al salir me vio que cargaba mi mochila y me pregunto si me llevaba a algún sitio. Le dije que sí y aproveché que tenía que cargar cosas de casa de mis padres a casa de Maider. Cuando me dejo en casa para coger las cosas paró la moto y el muy perro me dijo: “¿Me das un abrazo?”. Sabe de sobra que no le puedo decir que no. Sabía que si me decía de dármelo él era mucho más fácil rechazarlo, pero me temo que nos conocemos demasiado bien. El abrazo vino seguido de unos dulces besos y tras ellos subí a casa mientras él me esperaba abajo.

A la vuelta nos quedamos en la tienda charlando hasta la hora de apertura. En esa hora larga hablamos un poco por encima de lo que trataríamos el fin de semana y de algunas cosas que me habían molestado como que me hubiese ignorado el fin de semana anterior. Todo esto perdía bastante seriedad y solidez al tener en cuenta que desde que entramos en la tienda, hasta que abrí,  estuvimos todo el tiempo abrazados y beso va, beso viene…..

Mientras hablábamos salió el tema del tiempo que hacía que todo esto había comenzado, me di cuenta de la fecha y le pregunté “¿Sabes qué día es hoy?”, “Hoy hace un año de algo entre nosotros, seguro”, pero no supo concretar más. En vez de decírselo le reté a recordarlo y que me lo dijese en la próxima ocasión que hablásemos. Por la tarde chateamos un poco, pero me tenía que ir, así que olvidé preguntarle si había recordado la fecha.

A la mañana siguiente le envíe un sms: “¿Ya has recordado lo que hacía ayer un año? A lo mejor necesitas una base de datos, jejejejejeje…”. En pocos minutos me respondió: “Hizo un año que una rubiaza se lanzó a besarme, jeje. Desde ese día hemos tenido momentos malos, pero yo me quedo con algunos de auténtica felicidad.”

Lo había recordado,….. Bueno, no había sido exactamente así, pero sabía de lo que estaba hablando. Mi respuesta fue: “Más bien fue un hombre biónico el que se abalanzó sobre esta rubia que suscribe, jejeje ¡¡Muack!!”. Y este también tuvo respuesta: “Lo recuerdo y no olvidaré ese momento jamás. Siempre estaré agradecido por tu recibimiento y espero que tú nunca te arrepientas. ¡¡Muack!!” 

Ya no respondí más. Los mensajes sonaban a despedida prematura, a un quiero y no puedo sin sentido,…. No valía la pena responder. El sábado vería si efectivamente se trataba de un adiós.

¿Y AHORA QUÉ?

A mediados de este mes de enero decidí quedarme todo el fin de semana en casa; tenía cosas que hacer y además tenía la cabeza un poco revolucionada. La verdad es que el fin de semana me sentó muy bien, tanto para descansar, como para poder poner mis ideas en orden. Llevaba varios días dándole vueltas a mi relación con Joseba, pero era como pensar con la cabeza por un lado y con el corazón por el otro. Estos dos a su vez estaban divididos en al menos 2 visiones opuestas….. ¡¡Necesitaba una desfragmentación de disco lo antes posible!!

Con el paso de las primeras semanas del mes me di cuenta que las veces que habíamos quedado para vernos (ratitos cortos de unas 2 horas) había sido propuesto por mi. ¿Será que él no tiene interés en quedar y sólo accede cuando yo se lo propongo por aquello de quedar bien?

Esta duda generó un torbellino de ideas y conclusiones que me hicieron ver la infinidad de vertientes que toda esta historia puede generar:

Tenemos una relación maravillosa, llena de complicidad, ternura y buenos momentos, pero eso sólo sucede con asiduidad durante los periodos que Joseba está solo. Ahora de nuevo estaba “acompañado” y ya no se acordaba de mi excepto el día de trabajo. Sé que estoy en un segundo plano en su vida y así lo he aceptado, pero creo que también me he ganado un hueco un poco más grande que el que se me estaba ofreciendo. Entiendo que cuando está solo todo su tiempo libre es para mi y después ya no, pero de ahí a no disponer de ningún instante……

Los ratos que nos hemos visto ha sido siempre aprovechando su día de trabajo; un par de horas fugaces a la hora del desayuno justo antes de comenzar mi jornada laboral, un par de horas de visita inesperada en mi puesto de trabajo, un par de horas aprovechando mi tiempo para la comida, etc. Quizá no sea tan fácil vernos pero ¿por qué sólo estamos en contacto el día que él trabaja? ¿Nunca puede buscar un hueco para dedicármelo?

El planteamiento que analizaba una y otra vez no me gustaba nada: Si yo no lo proponía no nos veíamos, si yo no escribía no recibía nada, si no trasnochaba no hablábamos,…Es decir, era una tonta persiguiendo un imposible que corría más que yo. ¿Valía la pena seguir insistiendo? No quería ser una imbécil a la que hacen caso por pura lástima y consideré que antes de llegar a ese extremo, lo mejor era retirarme de su horizonte pero…… ¿Así de fácil iba a resultar todo? ¿Ni siquiera vas a pedir una decisión por su parte?

El hecho de tener mucho tiempo, varias informaciones desde diferentes visiones y una máquina de análisis a pleno rendimiento, hace que saques incluso conclusiones que unos meses antes ni se te hubiesen ocurrido a pesar de contar con la misma información:

“¿Será que ahora es a mi a quien le dice que no tiene tiempo y con la que queda en sus ratos libres es con Laura?”

“¿Será que al igual que me contó que a Laura le va dejando espacio para que se aleje poco a poco, me está haciendo a mi lo mismo?”

“¿Será que tras ver lo mal que lo pasé en la ruptura del mes de mayo no quiere volver a decirme algo así para no verme de nuevo así y espera que sea yo la que tome la decisión de alejarme?”

Todas estas y miles de conclusiones más eran las que mi cabeza iba generando a cada instante y a pesar de que todas me encajaban, no sabía muy bien cual podía ser la correcta, ¿o eran todas?

A ratos me sentía idiota por estar perdiendo el tiempo en analizar situaciones con una persona que ni siquiera se acordaba que existía y que posiblemente ni se había planteado la mitad de todas estas dudas. El domingo por la tarde fue quizá el peor momento. No por malo, si no por la intensidad de las dudas, conclusiones y razonamientos a los que llegaba: Estaba segura de que Joseba no había invertido ni un minuto en pensar en mi, y mucho menos en extrañarme. Yo llevaba todo el fin de semana intentando poner de acuerdo a mi cabeza y a mi corazón pero no se dejaban y él seguro que se había pasado el tiempo con su chica disfrutando de su compañía y quehaceres habituales. Dejé de sentirme idiota y comencé a sentirme un poco desilusionada, un poco desinteresada,… o más concretamente, DESMOTIVADA.

Toda esta historia comenzaba a resultarme absurda, estúpida, falsa,..... ¿Qué sentido tenía insistir en algo que nunca va a cambiar? ¿Cuál era exactamente mi objetivo en todo esto? ¿Debía seguir por el mismo camino teniendo en cuenta que lo que pasaba una y otra vez comenzaba a ser un bucle?

Me di cuenta que me había ido dejando llevar y que simplemente dejaba que las cosas fuesen sucediendo y me había acomodado de tal manera que había obviado la falta de destino por mi parte, es decir, le daba vueltas a un tema con afán de solucionarlo sin darme cuenta de que no había ningún objetivo por lograr. ¿Cómo se puede llegar a un lugar que no sabes cuál es?

Decidí que debíamos hablar y sin tardar mucho, ya que no quería sentirme durante más tiempo así, por lo que se lo comenté en cuanto pude para no demorarlo más. Cuando se lo comenté me dijo que él también había estado dándole vueltas a todo y que le parecía apropiado que lo hablásemos, pero que como nos iba a llevar bastante tiempo debería ser en fin de semana. Yo no podía ni miércoles, ni jueves, ni viernes, por lo que su disponibilidad para sábado o domingo me cuadraba perfectamente. Cuando se fue me dijo; "Tendrás noticias mías"., pero el fin de semana pasó y no tuve comunicación por su parte.