MARCANDO OBJETIVOS

Hoy estoy tremendamente cansada y con sueño, pero creo que no tiene mucho sentido; ayer no he hecho nada y tampoco me acosté tarde, así que no es muy normal sentirme así. Supongo que lo que me pasa es un poco un cúmulo de cosillas que al final me causan esta “fatiga”, por llamarlo de alguna manera.

Cada día hago un rápido repaso de mi vida y pienso en aquello que quiero conseguir. Me baso en objetivos a corto plazo, creo que en mi caso no me convienen los objetivos a largo plazo ya que me generan una ansiedad que me bloquea y obstaculiza el presente. Tengo unas metas marcadas, como todos, pero son tan evidentes que no tengo que hacer nada especial, salvo aprovechar el día a día y creo que ellas solas se mostrarán frente a mi.

¿Qué ocurre cuando te marcas esos mini objetivos diarios y no los consigues por culpa de terceros? Pues creo firmemente que los objetivos estaban mal planteados. Cada uno debe ser responsable de si mismo, así que lo de culpar a terceros cuando las expectativas no se cumplen es un ERROR.

Llevo ya un tiempo en el que trato que estas cosas no me pasen, incluso muchas veces lo he conseguido, pero soy humana y aún son muchas las veces en las que caigo en el error de dejarme llevar y entrar en ese círculo que me genera desazón y malestar. La culpable: SOLO YO.

Siempre digo que debemos aprovechar los momentos que cada día nos regala y si estos son con la compañía deseada, mucho mejor. Podemos hacer un momento perfecto con muy poco,…. Lamentablemente, también es muy fácil estropearlo. Así que como no me gusta nada la sensación que se te queda cuando un plan no sale como habías pensado, voy a intentar que eso no vuelva a suceder.

No soy partidaria de los planes, como ya he dicho otras veces, más que nada por aquello de condicionarte y que luego al final lo improvisado sea lo mejor, pero claro, hay cosas inevitables, fechas señaladas en las que no se puede dejar de hacerlo, como por ejemplo carnaval.

El plan de diversión parecía asegurado y así fue,….. Al menos la primera parte de la noche. A eso de las 4 de la mañana se sucedieron una serie de acontecimientos, por supuesto inesperados, que hicieron que ya no estuviese a gusto; mosqueos, malas contestaciones, borracheras, gritos,….. Una cosa es salir de fiesta y dejarse llevar por el ambiente y otra muy distinta es perder el rumbo. No me estaba divirtiendo, no me gustaba el ambiente y aunque estuviese encantada con mi disfraz y el resultado del maquillaje, sólo pensaba una y otra vez en lo calentito que se tenía que estar en casa.

Esa misma noche, unas horas antes había recibido una sorpresa de esas que te suben el ánimo y hacen que te sientas pletórica: Joseba me llamo por teléfono. Dice que estaba por ahí y se acordó de mi, así que me llamó para ver dónde estaba y si había posibilidad de vernos. Yo estaba en plenas risas con la gente que había quedado y aún en casa, por lo que nos quedaba un rato para salir. Cuando se dio cuenta del panorama me dijo que no quería cortarme el rollo ni condicionarme, que había hecho ya planes y que debía pasarlo bien, no tener que estar pendiente de él, ni dejar a mi grupito de lado. La verdad es que visto el resultado, hubiese sido más gratificante haber quedado con él al bajar a Bilbao :P  Según me comentó, llevaba varias horas ya en la calle y se había quedado sin ganas de seguir por ahí. A él también le cortaron un poco el rollo, por lo que se acordó de mi (cosa que me encanta), pero a mi me pillo tan fuera de juego que apenas supe que decirle, pero me hubiese gustado mucho poder verle y pasar con él aunque fuese un ratito, pero la situación es la que es, así que ¿qué se le va a hacer?

Mirando el lado bueno, que hay que tener en cuenta que siempre lo hay, bebí menos, me acosté antes y pasé menos frío que si nos hubiésemos quedado hasta las mil como de costumbre.

Tras esta experiencia he tomado la decisión de hacer lo que yo quiera, lo que yo decida y lo que a mi me haga sentir bien. Creo que si a mi me hace sentir bien, quien me quiere lo entenderá (yo lo haría) y si es lo que he decidido, supongo que lo habré reflexionado. No contaré con nadie, lo que no significa que vaya a estar sola, si no que me plantearé mis objetivos, algo que sea capaz de hacer yo sola, por mi misma, así no dependerá de nadie más que de mi. Después si alguien desea participar tendrá un hueco, pero no será necesario, solo opcional. Creo que para mi será mejor así: “Es mejor no esperar nada y sorprenderte que esperar algo y decepcionarte”.

Mi vida es mía y solo yo tengo el derecho, pero sobre todo la obligación de guiarla. He de ser consciente de mis limitaciones, pero que eso no me impida una evolución acorde con mis objetivos. Quizá nunca encuentre a mi alma gemela, o nunca pueda visitar esos lugares que tanto me gustaría, o tenga que acostumbrarme a un horario laboral de comercio para siempre,….. Pero es mi realidad y mientras yo no efectúe cambio alguno en ella, todo seguirá igual. No es el momento de cambios, pero sí es el momento de asumir mi realidad; tengo problemas económicos que me durarán muuuuuuuuuuuuuuuchos años (por cortesía de Antonio y mi mala cabeza), pero afortunadamente tengo un trabajo con el que poder ir mes a mes tirando un paso más adelante. No podré viajar, comprarme caprichos, no podré salir a cenar o a tomar copas, pero debo estar orgullosa de mi misma por ser fuerte y seguir con la cabeza en alto.

Comentarios como el que me dejó en mi última entrada Aniña (@vampyevil) me ayudan a seguir adelante. Son como cuando me ponen la inyección de vitaminas, sólo que esto no duele y da mayor subidón. El comentario decía: “Eres grande, lo demuestras en cada entrada”…… ¿Sabes lo bien que uno se siente cuando lee este tipo de comentarios? Yo, personalmente, cuando lo leí sentí un vuelco en el estómago y casi se me saltan las lágrimas. La verdad es que como me decía el otro día mi compañera de trabajo, yo para estas cosas soy un poco moñas, pero no lo puedo evitar. Por dentro de esta fachada de ninja de la sociedad, lo que hay es una princesa de peluche que sonríe con cada pequeño detalle, disfruta con cada momento romántico, sea hacia mi o entre otros, e incluso llora cuando hay algo precioso que poder admirar. ¿¿Es eso ser moñas?? Supongo que sí, pero…… ¡¡Estoy orgullosa de ser MOÑAS!! Y ojala alguna vez encuentre a alguien que sea tan moñas como yo. A lo mejor me termina cansando, pero seguro que me da muchos momentos maravillosos de esos en los que a mi se me saltan las lágrimas; canciones preciosas, espectáculos improvisados en mitad de la calle, llamadas en el “¿Quién te tienta a las 9.30?” o simplemente detalles románticos de esos que parece que solo suceden en las películas J

Al final tanto hablar de estas cosas me va a generar mayor ansiedad que lo que comentaba de los objetivos a largo plazo, jejjejejejejejeje…….

Conclusiones del día: No dejaré que las tonterías estropeen mis buenos momentos y menos si son de terceros. Estaré disponible para toda persona que me necesite, pero no me dejaré llevar por aquellas situaciones o  visiones que me hacen “envenenarme” y descentrarme de mis fines. No echaré de menos a  nadie ya que si tienen que seguir en mi vida, volverán y si no vuelven, es que debían desaparecer y es mejor empezar cuanto antes cuando de olvidar se trata. No envidiaré “la buena suerte” de quienes pueden hacer o permitirse cosas o actividades que yo no puedo, ya que la experiencia me demuestra a diario que la vida plena no depende de eso. No discutiré en vano, creo que siempre es en vano, pero como ya he dicho, sigo siendo humana y creo que de momento me resultará imposible no hacerlo nunca.

Las 3 frases que hoy debo aprender y aplicar en mi día a día son:

“Las palabras que te dices a ti mismo afectan a tu autoimagen y ésta determina qué medidas tomas”.

“Siembras un pensamiento, cosechas una acción. Cosechas una acción, siembras un hábito. Siembras un hábito, cosechas un carácter. Siembras un carácter, cosechas un destino”.

“Los principios de una vida equilibrada deben ser: Laboriosidad, compasión, humildad, paciencia, honestidad y coraje”. En esta última creo que debo centrarme sobre todo en la paciencia, aunque creo que cada día voy mejorándolo un poco,…… Y cuando leo este tipo de cosas o esas de “soy mejor”, creo que es que no me he centrado mucho en la humildad, jejejeejejejejejejeje

Ya casi he terminado de leer el libro que comentaba el otro día y la verdad es que me da hasta pena, pero tengo clarísimo que he hecho una buena inversión comprándolo; me ha ayudado y seguirá haciéndolo, pero además, hay al menos 2 personas a las que sé que les vendrá igual de bien que a mi; Maider y Joseba. Así que cuando termine, mi libro ya tiene destinoS J